2 de julio de 2021. El pasado 29 y 30 de mayo culminó el proceso grupal del programa Agentes Generadores de Cambio en el Planeta. Los participantes pudieron compartir los aprendizajes y se sentaron las bases de los programas de voluntariado internacional que Proclade Bética está revisando y fortaleciendo. ¿Quieres saber más? ¡Sigue leyendo!
Agentes Generadores de Cambio en el Planeta es un programa enmarcado dentro del proyecto Agentes Generadores de Cambio, llevado a cabo por Proclade Bética con la financiación de la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AACID). Como comentamos en anteriores noticias, este programa se elaboró con el propósito de hacer una reflexión profunda sobre el voluntariado internacional y sobre su importancia como fuente de cambio en la sociedad.
Tras 6 meses de implementación, se ha creado un equipo motor de 7 personas, han participado más de 20 personas referentes en voluntariado internacional formándose como acompañantes de las experiencias, y se han realizado 3 paneles online con la presencia de las contrapartes de las provincias claretianas de Antillas, Centroamérica, San José del Sur, Colombia-Venezuela, Zimbabwe; de los proyectos en Brasil y Marruecos; de personas de Argentina, R.Dominicana, Colombia, Puerto Rico, Zimbabwe y Marruecos. En estos paneles se analizó la situación de los derechos humanos y la visión de un voluntariado global, estructurado y con objetivos comunes. Los aportes y las conclusiones de las personas participantes están haciendo posible la creación de un programa de voluntariado internacional propio de la ONGD Proclade Bética.
El desarrollo del programa ha contado con Alfonso López-Fando de SOWOS, quien ha guiado, acompañado y formado durante todo el proceso, con una experiencia de más de 30 años en el sector del voluntariado internacional además de en psicología. La comunicación en contextos interculturales y cómo afectan las diferentes desigualdades en las relaciones cuando viajamos a otros países, fue abordada por Cia Salamandra.
Todas las personas participantes manifestaron la importancia de la existencia del voluntariado internacional como fuente de cambio y su disponibilidad en mayor o menor medida en la creación del mismo. Una de las conclusiones principales ha sido la idea de que el voluntariado es un viaje de ida y vuelta, que es necesario un viaje al propio interior y que las personas se puedan insertar en comunidades de acogida. Resaltaba la posibilidad de recibir en España voluntariado de otras partes del mundo. Con todo esto se crearía una red de personas comprometidas, un voluntariado global que impulse el cambio que queremos en el mundo.
De esta manera, con mucha ilusión, podemos anunciar que Agentes Generadores de Cambio en el Planeta ha sido el comienzo de lo que será el programa de voluntariado internacional de Proclade Bética. Ya se está sistematizando todo lo aprendido para crear un curso online, se organizará una mesa redonda en el próximo curso, y se están estableciendo acuerdos con otros países para poder generar las experiencias de encuentro en las que esperamos que se implique mucha gente.
¡Prestad mucha atención a este proceso que seguro traerá cosas muy importantes!
Os dejamos el testimonio de Amador Núñez cmf, participante del programa:
“A mi edad me apunté a este curso de voluntariado AGC Planeta, con una doble finalidad. En primer lugar, porque quería revivir mi experiencia de voluntariado (10 años de misionero en Filipinas y 5 años en Zimbabwe) que han marcado mi vida y han dejado en mí recuerdos imborrables. Empecé la experiencia con 26 años.
En segundo lugar, porque en esta etapa de mi vida quiero seguir manteniendo esa tensión y comunión con las gentes y lugares que viví para que sigan marcando mi vida en esta otra parte del mundo “desarrollado” y de la sociedad de bienestar sin olvidar la globalidad de la gran familia humana de la que me siento un miembro activo.
Entrando ya en este curso sí que me he sentido a gusto desde el principio y ha puesto a mi alcance herramientas que también sirven en el manejo del día a día donde me toque vivir.
¿Qué he aprendido? A conocerme mejor y a valorar actitudes y hechos que la urgencia de soluciones inmediatas, por falta de tiempo y medios, no se analizan en profundidad; ahora veo que había buena voluntad, pero faltaba preparación y me agobiaba más resolver la situación que entrar en un proceso de cambio y transformación donde los destinatarios fueran también los agentes de su propio cambio.
El primer bloque sobre el conocimiento de las propias cualidades, me ayudó a sintetizar mi actitud en el proceso de acompañamiento en años pasados; resalto positivamente mi actitud de escucha, cercanía, disponibilidad e interés por conocer y empatizar con el otro para poder delimitar bien sus necesidades antes de hacer mi propia oferta, pero también reconozco la falta de preparación y cualificación.
Hasta hace poco decíamos que el hombre era un “animal racional”, hoy tendríamos que decir que el hombre es una “inteligencia emocional”; nuestros impulsos y emociones son los caballos que nos mueven a actuar, pero “el cochero” tiene que saber manejar el carro. Fue interesante esta sesión para conocer cuáles son esos hilos ocultos o conocidos que nos mueven en la vida y en concreto en cualquier tipo de voluntariado o acción gratuita en la que nos implicamos. Se analizaron de forma dinámica y participativa los miedos, las tristezas, las vergüenzas… las alegrías y los vínculos de amor que entretejen nuestras vidas.
He llegado a la conclusión de que cuando me doy a los demás conociendo mis limitaciones y mis habilidades voy creciendo con los otros; comparto lo que soy y tengo; celebro la vida; bebo; doy gracias y me alegro con la alegría de los otros.
Al final me quedo con el lema: SÉ TÚ MISMO, ABIERTO A LOS OTROS”.